Una vela encendida simboliza la memoria, el respeto, la guía y la paz para quienes ya no están, y ofrece una conexión emocional y espiritual entre los vivos y los muertos.
Una vela encendida simboliza la memoria, el respeto, la guía y la paz para quienes ya no están, y ofrece una conexión emocional y espiritual entre los vivos y los muertos.
Si tus padres aún viven, quizás no lo sepas pero, cuando mueren, muere una parte de ti, una parte importante que te identifica, quizás, como ninguna otra. Porque una de las primeras referencias que tienes para saber quién eres (y así será el resto de tu vida con mayor o menor intensidad) es que eres hija de quien eres, para lo bueno y para lo malo. Tus padres, valga la redundancia, son tus orígenes: dónde naces, con cuánto, cómo te educas, de qué te rodeas y de quién ...Tus orígenes marcan tu forma física: todos tenemos las manos de uno de nuestros progenitores, el pelo de otro, las cejas o la forma de andar de alguno de ellos. Configuran tu forma de pensar, bien porque piensas igual que alguno de los dos o completamente lo contrario. Copiamos de ellos y repetimos, una y otra vez, hasta las conductas que más hemos criticado e incluso odiado. Somos ineludiblemente hijos de nuestros padres. Y cuando no están, ni uno ni otro, pierdes una parte de tu identidad; empiezas a desdibujarte. Y comprendes con toda claridad, que no hay vuelta atrás, que cada vez estarás más difuminado hasta desaparecer como ellos. Su muerte es el principio del final de tu vida. Esto en el mejor de los casos, siempre que no tengas una enfermedad u otras circunstancias que te haya enseñado tal cosa, aún en vida de tus padres. Pero estos son una minoría. La mayoría sienten el pellizco de la muerte cuando les faltan sus padres.
Para gente como yo, Las Vegas lava los pecados, como un lavado de autos purificador. Es igual que Lourdes para jorobados y tullidos.
CASINO. Martin Scorsese.
Jean Paul Sartre: "El desorden es el mejor servidor del orden establecido...Toda destrucción confusa debilita a los débiles, enriquece a los ricos, aumenta el poder de los poderosos".
La recoge Pedro Baños en "Así se domina el mundo".
Una vez, en la calle Gran Vía de Madrid, me encontré con una conocida, una ex colega para mas señas. Resultó ser un encuentro incómodo: yo creo que fui natural, pero era más que evidente, que ella estaba incómoda. Me transmitió tan mala onda que, nada más irme, nada más decir adiós, me arrepentí de haberle sonreído durante el breve tiempo que la tuve delante. Solo merecía mi desprecio, pensaba. ¿Por qué le he sonreído? Tomé la determinación de poner cara de perro cada vez que me encontrara con "personas de ese tipo", con personas a las que sé que no les caigo bien y que coincide, como es natural, con que tampoco ellas son de mi agrado. Estaba segura de que en situaciones así, lo correcto era mantenerte seria y con las mínimas palabras posibles.
Pues no es así. Ahora puedo asegurar que no, que lo mejor es sonreír. Si es a un amigo, perfecto -esto no merece explicación- y si es a un enemigo, también es perfecto. Sonreír al enemigo produce en él una sensación de inestabilidad, de confusión, de intranquilidad; se pone nervioso y eso provoca que el encuentro sea breve, algo que ambos deseamos. Pero es que además, la sonrisa también disuade al miedo. Compruébalo:
-cierra los ojos,
-piensa en algo que temas,
-esboza una sonrisa, aunque sea tenue tipo Monna Lisa.
-Ahora ¿ves cómo eso a lo que temías te desvanece?
Funciona siempre. No tengas miedo a parecer estúpida, sonríe. Y no tengas miedo a nada porque puedes vencer cualquier miedo, el que sea, SONRIENDO.
-dolor de espalda,
-dolor de muelas,
-dolor de rodillas,
-dolor de cabeza,
-ansiedad,
-depresión,
-miedo,
-mala digestión,
-estreñimiento,
-sobrepeso,
-arrugas,
-flacidez,
-manchas en la piel,
-poca fuerza de voluntad,
-escasa determinación,
-nulo deseo de leer,
-pocas ganas de hacer ejercicio,
-dificultad para hablar inglés o cualquier otra lengua......
La lista sería interminable. Puedes añadir cualquier cosa que quieras mejorar. Lo fabricas tú mismo porque todos disponemos de los ingredientes necesarios: nos los regalaron al nacer. Ahora bien, como los ingredientes que realmente funcionan están dentro de ti, hay que darles una forma fuera de ti; hay que escoger algo material que tendrás guardado en un bote como el de las cápsulas de las vitaminas, por ejemplo. Al tomarlo, al hacer el gesto que haces cuando tomas un paracetamol, impulsará lo que tienes dentro y mejorar o eliminará el problema.
La sustancia que activará lo que llevas dentro para curarte puede estar representada por lo que tu quieras, por ejemplo: un piñón, un pistacho, una almendra, una pasa o una uva fresca, un ajo, una puntita de canela.....lo que te guste. (Mi placebo es una cucharadita de aceite de oliva).
Ya me contarás si funciona.