¿Somos siempre la misma persona?
Mi memoria cambia cambia a su capricho: hoy recuerdo una cosa, mañana no, mañana recuerdo otra y aprendo algo nuevo que dentro de un mes olvidaré. De pronto, algo me hace recordar un hecho remoto tan importante que me parece mentira que lo hubiera olvidado. Empiezo a leer un viejo libro que lleva años en la estantería y resulta que lo tengo subrayado y los márgenes están llenos de apuntes con mi desordenada letra; antes yo sabía lo que enseñaba ese libro, luego lo olvidé y ahora tengo que volver a leerlo para volverlo a saber.
Así me parece todo: unos grandes almacenes donde hay cosas baratas, caras, carísimas, malas, buenas, útiles, inútiles, absurdas, y tú vas eligiendo comprarlas o no, mirarlas o ignorarlas, admirarlas o despreciarlas y las usas o no, las tiras, las reciclas, las destruyes, las guardas.
Los cambios y cualquier decisión nos cambian y aunque parezcas la misma persona, no lo eres.
La memoria actúa según su capricho.
Hay gente que te saluda y no recuerdas. ¿Qué relación tenías con ella? No sé. Solo puedes dejarte llevar por la intuición que te dice que te llevabas bien, que la apreciabas. Pero a veces no tienes ni intuición:¿la conocí?
Todo esto me está haciendo pensar que en unos días hablaré con alguien al que seguidamente olvidaré.