QUIÉREME

domingo, 10 de febrero de 2019

YO, MI, ME: MI OMBLIGO Y YO


ROMPER LA BARRERA

Vives envuelto en una membrana. Te limita los movimientos y hasta los pensamientos. Lo sabes, y a veces, de tu cuerpo, que necesita más espacio, sale una ira que golpea la membrana o grita como rayo en una tormenta. Pronto se aplaca y vuelves a la rutina de tus actos, de tus pensamientos y emociones, dentro de la membrana. La costumbre te calma, te proporciona orden, certidumbre y finalmente comodidad. Por eso te quedas ahí. Pero llega un momento en que la necesidad de respirar otro aire es más fuerte. Y ahora, para salir necesitas romper la costumbre, decirle no a mamá comodidad, ¿quién se atreve?
La cosa es que ahí fuera puedes encontrar cosas que te den satisfacción. ¿Cuándo es la última vez que te sentiste satisfecho por algo que hiciste tu?
Rompe la membrana, haz lo que tengas que hacer. La comodidad es una falsa amiga. Haz. Haz. Incluso puedes convertirte en mariposa, mejor dicho, incluso puedes dejar salir la mariposa que hay en ti luchando por su libertad desde ¿hace cuánto?