Esta mañana he quedado con Gadea a tomar café.
Me cuenta que ayer, cuando llegó a casa después del trabajo, se preparó algo de
cena y se sentó frente a la tele. Dice que, con la primera noticia que
escuchó, se puso de mal humor y que, en unos minutos, estaba más
cabreada que un mono. " Todas, absolutamente todas las noticias que
escuché durante la media hora que estuve frente a la tele ", me
dice, " fueron sobre robos, sobre políticos que nos roban, banqueros
que nos roban, nobles ( dicho de una persona o de sus
parientes:que por su ilustre nacimiento o por concesión del soberano posee
algún título del reino ) que nos roban......Y luego salen algunos
"tertulianos" diciendo que no se pueden tolerar las manifestaciones
ante el Congreso, o en la Puerta del Sol ". Sigue diciendo Gadea que
se levantó de su asiento y les gritó: " ¿es que no sabeís que la
desobediencia civil está inventada desde hace siglos ? ¿ es que no estabaís en
clase el día que contaron como Martin Luther King escribió que "se
tiene la responsabilidad moral de desobedecer normas injustas" ? Mira, me
dice que les dijo, "no quiero seguir discutiendo con vosotros. Voy a
ver una película ". Dice Gadea que su abuela hacia lo mismo, hablaba
con la tele como si fuera un miembro más de la familia, preguntaba a los
presentadores de informativos o respondía a los personajes de las telenovelas
como si la pudieran escuchar. Y dice Gadea que ella nunca pensó que estuviera
mal de la cabeza. En fin, yo no se que decir, solo se me ocurre rezar, esperar,
soñar con un lider como a los que se refería mi amiga, a un Martin L.
King, o un Gandhi o un Mandela. ¿ Donde estaís ?
¡Salid, por Dios ! ¡Salid! Nosotros os seguiremos.