QUIÉREME

Mostrando entradas con la etiqueta ZAPATOS. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ZAPATOS. Mostrar todas las entradas

martes, 22 de diciembre de 2020

EL PROCESO DE LAS COSAS

 Dice Martha que después de "yo pensé" siempre viene una pendejada. Así que, vaya por adelantado que lo que a continuación voy a contar, es, o puede ser, para algunos, una pendejada. La cosa es que yo pensaba que si tuviera la posibilidad de vivir una segunda vida, dejaría atrás todo aquello que quisiera dejar atrás. Por ejemplo, si muriese, al resucitar:

-me importaría una mierda lo que la gente pensara de mi,

-lucharía sin rendirme por las cosas que quiero,

-permanecería siempre asida a la cuerda que llevo en mi interior y que evita que me precipite al vacío,

-le compraría un Tesla a César, 😏,

-me mantendría siempre equilibrada emocionalmente, y por tanto,

-tendría la palabra perfecta para el momento oportuno y, entre otras cosas,

-me incomodaría, solo un poquito, tener la casa desordenada y/o sucia.

-(Por supuesto, pasaría de las pelotillas y la pelusa en la ropa negra y de los zapatos descuidados).

   Bien, pues he muerto, he resucitado y...... no es así. Para empezar, después de volver a nacer, por cierto, que fue el mismo día que la vez anterior, cómo la vez anterior, he tenido que aprender a respirar, a comer...y estoy aprendiendo a caminar, a hablar....Y todo lo que quería dejar atrás se ha venido conmigo. O sea, que NO HAY ATAJOS. Para cambiar es necesario pasar por el proceso. La esperanza que tengo es que hace casi un año que empecé. Así que, ya me queda menos.



domingo, 1 de septiembre de 2013

LAS MARCAS Y EL DISEÑO

    Me dice Gadea esta mañana enérgicamente:
- ¿ Qué te parece ? Ayer pasa por delante de mi X. La miré, inevitablemente,  porque iba pidiendo guerra y llamando la atención con unos zapatos, de los que, si tengo que decir algo bueno de ellos, es que eran de marca y puede que fuesen cómodos. La miraba caminar, como caminan las ocas que cría mi padre, mentras pensaba, asombrada, en lo feos que eran y en el dinero que le habría costado algo tan horroroso. Y X, que veía mi cara de espanto por el rabillo del ojo, me dice :
-¿Qué miras? Tu no puedes comprar estos zapatos ni en sueños.
Comprar, dijo comprar, que no podía comprarlos. Me levanté y le respondí:
-Mira guapa, soy profesora, no me dedico a hacer videos musicales ni programas de poligoneras, ni nada por el estilo,  a si es que, no, nunca compraría unos zapatos como esos. Tengo, seguramente, una posición social mas alta que la tuya, aunque tu no lo creas, y por lo tanto, si, si puedo comprarme unos zapatos como esos. Pero la verdad, hay que tener muy mal gusto y ser una friki para calzarse así.  Te quedarían mejor de tocado, piénsalo.
  No hubo contestación y siguió su andar de oca hasta su puesto donde simuló que tenía mucho trabajo.
 Gadea me preguntaba qué me parecía la actitud de X y yo le contesté que hay a quien le gusta las marcas y hay a quien le gusta el diseño.
  Si hay algo que caracteriza a Gadea es su sensibilidad para elegir cosas bonitas, ya sean cuadros, poemas, canciones o camisetas y zapatos . Es muy personal en su casa, en su trabajo, en su forma de vestir. Dedica su tiempo a elegir y a hacer las cosas bien y eso es una gran cualidad. Efectivamente podría comprarse el" handbag Louis Viutton" que quisiese, seguro que su marido ha intentado regalarle uno alguna vez, pero no le va. Comprarse un Louis Viutton es como agarrarse a lo conocido y resistirse al cambio, porque en todo cambio se pierde algo. Es pensar: me ha costado mucho llegar aquí y no me mueve ni Dios. Es tener instalado en la mente el pensamiento único y verdadero y tengo que comunicarselo a los demás que, por supuesto están equivocados.
  Yo, estoy con Gadea. ¡Viva el diseño!