UNA CAJA CUALQUIERA

   Enfrentarte a una página en blanco es como cuando el camión de la mudanza te deja 200 cajas en el salón de tu nueva casa:  o empienzas por donde sea, por la que esté mas cerca,  o pasas un buen rato pensando por donde empezar y finalmente te decides por la que está mas cerca,  o lo dejas para mañana con la esperanza de que el descanso te ilumine y te de la energía suficiente. Y al día siguiente empiezas igualmente por abrir una caja de forma aleatoria.  Eso es lo que estoy haciendo en este momento: abrir una caja cualquiera a ver qué encuentro. Es pequeña y contiene cosas pequeñas:
-Una foto en la que estoy en una fiesta con varios amigos. Es de hace mucho tiempo y todos hemos cambiado considerablemente. El que más, quizás, mi amigo Hugo Carbonero. Físicamente está irreconocible y la última vez que lo vi, tampoco reconocí su personalidad. El lazo de la complicidad que siempre nos había unido, lo había cortado alguién, otra persona que ahora goza de su amistad y su compañía como yo lo hice antes.
-Un cuaderno viejo que me regaló una amiga, una de las personas mas especiales de mi vida. En él tengo apuntes de pensamientos, deseos, ideas sin conexión.... Todos son bastantes tristes y se refieren a un momento definitivo de mi vida: la muerte de mis padres que me provocó, entre otras cosas, una inestabilidad emocional que nunca he logrado recomponer ni fortalecer. 
-Un pequeño albún de fotos en blanco y negro. Eran unos amigos con los que hice uno de los mejores viajes de mi vida. Los perdí, intenté recuperarlos pero no quisieron saber nada de mi. Nunca supe por qué. Durante mucho tiempo me causaba pesadumbre, ahora no siento nada. Supe que ella no pudo soportar las infidelidades de él. Imagino lo que sufriría porque jamás conocí a nadie tan enamorada, sentía verdadera pasión por él. A veces creo que él, simplemente,  no aguantaba la presión de ese amor. 
-Serpentinas y globos de una fiesta de cumpleaños de uno de mis sobrinos. Lo pasamos bién. Los niños se divirtieron y los mayores quizás mas. Estabamos los justos y todos de buen humor. Seguiré guardándolo porque el recuerdo de aquel cumpleaños siempre me provoca una sonrisa. Me hace sentir bien. 

¿ ADIVINA QUIÉN ES ?

  Ayer Gadea me describía a alguién:  una chica ( con más de 40 se sigue llamando chica a todas, aunque superen los 50 ) de estatura media, pelo largo tendiendo a liso, mechas rubias, más bien delgada, viste a la moda, casual, o sea, cuidando los detalles. Se muestra ligera, despreocupada porque lo tiene todo controlado: en casa, en su matrimonio, con sus hijos, hasta con su propio yo. Su casa es la mejor decorada aunque no le ha pusto mucha atención, ha sido algo natural, espontáneo: una cosa de por aquí, otra de por allá, cositas que hacen un conjunto perfecto debido a su buen gusto y a su gran capacidad para elegir. Su matrimonio lo domina ella, sin duda alguna, el marido hace lo que ella dice y cuando ella lo dice,  ¡faltaría más! Él jamás ha tenido un desliz ( segunda acepción del diccionario de la RAE: desacierto, indiscreción involuntaria, flaqueza en sentido moral, con especial referencia a las relaciones sexuales. Jamás. Sus hijos son ejemplares y sí, tienen las cosas de la edad: beben alguna vez, llegan tarde a casa, alguna vez, sus notas son regulares, alguna vez,  y alguna vez se muestran maleducados pero debido a la edad. Ella es una persona segura de si misma, muy segura, capaz de hacer lo que se proponga, resuelta, se siente guapa, lista, muy lista y, no se si debido a su inteligencia pero, desprecia muchas cosas y a mucha gente. En fin, que va sobrada. Y también lo refleja su lenguaje: utiliza con frecuencia esas palabras, que no palabrotas, algo malsonantes que suelen violentar al interlocutor, a ese que no es capaza de mandarla a.......paseo. ¿ La conoces ?

TODO LO QUE TENGO ERES TÚ

Tengo una alfombra persa 

llena de historias eternas

se presenta humilde y rica

amable y poderosa
como una sorpresa con 
recovecos también oscuros

evoca: el primer amor el primer desprecio

la primera cobija y la primera ausencia

me habló de la paciencia como virtud

y del odio como sentimiento vano

imposible desgastarla

inútil evitar su bendita protección

Tengo un parque infantil

lleno de momentos y olores

que te parecerá humilde y rico 

amable y poderoso

cálido,  seguro de sí

y muy confortable

aquí y allí, le he amado
y allí y aquí,  he llorado

hay un espacio para conversar, 
pensar, y morir

para reírse, para añorar

ahora me enseña el cielo, 
en tres minutos el cansancio de la rutina

me golpea con la imposibilidad de atrapar el tiempo

cuando me devora el ansia 
y el vano deseo de agarrarlo

¡que fácil sucumbir a su orden!

¡que fácil mantenerse bajo su protección!
aquí me quedo

Tengo un sueño

una vidriera multicolor

rota por mil sitios y recompuesta cien veces

mis pensamientos, amarillos como el Sol

queman, desaparecen, vuelven con timidez,

marcan la piel la hieren la abrasan

mi voluntad es una nube

con forma de ángel y fondo de bestia

transparente como el cristal quebradiza como el vidrio

       a veces me mueve a veces me enjaula

en la lucha por querer cuando ella dice: aborrezco.

luego está el azar

si es dorado te endiosa

si te toca en forma de volcán

y te arroja por el cráter

llevarás luto toda la vida

si te deja besos sonrisas azules

entonces debes agradecer y

vestirte con besos sonrisas y azules 
siempre

EVOLUCIÓN EMOCIONAL 2